martes, 11 de febrero de 1992

La QUINTAESENCIA de TRESCIENTOS Y PICO "CURSOS de CREATIVIDAD" desde 1.971 (20 años de siembra)

=== CREA - TI - DI - VA === "CREA un DISEÑO con VALOR"

Por JOSE SEBASTIAN REINOSO, Dr. Ingeniero y Psicólogo Industrial, 1.992


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AHORA... "ENTRE NIÑOS VA A ANDAR EL JUEGO"
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En UNA ESCUELA DE NIÑOS: Cuento Animado para explicar ¿QUE ES UNA AGENCIA DE PUBLICIDAD?

Erase que se era... Se cuenta que... cuando aquella importante Agencia de Publicidad de la Ciudad estaba a punto de cerrarse: los empleados ya se habían marchado - al terminar por aquel día la jornada laboral - y ya la Secretaria de Dirección sólo esperaba que el Gerente saliese de su Despacho, ocurrió que PEPITA tenía que conversar con el Gerente "sólo un minuto", para anunciarle que le esperaba su esposa "donde siempre".

(No llamó a la puerta del despacho antes de que saliera, para decírselo, porque aquella tarde le encontraba muy malhumorado). Hacía, pues, sus preparativos para marcharse cuando el timbre de la puerta sonó insistentemente. ¿Quién podía ser a estas horas?, se preguntó. Porque habiendo pasado ya un cuarto de las ocho y, por tanto, tres cuartos desde las siete y media -que era la hora de cierre- nadie podía esperar que hubiera aún gente en la Agencia.

Se asomó por la mirilla y apenas pudo ver con aquella luz del rellano, tan inexplicablemente débil. Preguntó: "Ya hemos cerrado, ¿Quién es?" Y entonces una voz apagada contestó que era un posible cliente, y de mucha importancia, que tenía que salir de la ciudad aquella misma noche y que quería hacerles un encargo urgente.

La Secretaria se atrevió a abrir la puerta ... (tenían cancela de hierro y bien fuerte) y, por otra parte, ya se adivinaba por la voz que la persona que llamaba era un viejecito. Además... ¿No se veía acaso que era en efecto una persona mayor la que afuera esperaba? Podía ser un despistado... una persona de provincias ignorante de las costumbres de la capital... en fín, abriría.

Como podeis figuraros, todos estos eran pensamientos que CRUZARON -y nunca mejor dicho- la mente de la Secretaria en un corto instante, y que "autorizaron" su decisión de abrir la puerta... dejando la cancela cerrada y simplemente mirando por la puerta entreabierta.

Efectivamente, era un viejecito (y ¿Cómo lo había adivinado con aquella insignificante luz de la escalera?). Y mal vestido. ¿Qué querría aquel hombre con aquella pinta? Era un hombre muy mayor... con un largo abrigo gris, largo... y un poco raído. Llevaba barba blanca y parecía sacado de algún libro religioso... en todo caso, antiguo.

Como insistía tanto, la Secretaria le dijo que preguntaría al Gerente y... cerró la puerta con un suspiro de alivio: la verdad es que tenía un poco de miedo. Esta vez era cosa de llamar a la puerta del despacho, y así lo hizo... oyendo un: PASE!, en un tono... sí, ese tono que a ella le parecía como "de malhumorado" aquella tarde.

Le explicó al Gerente aquel caso tan raro y... el Gerente se echó a reir. "Nada, Pepita, que está usted muerta de miedo. Cómo se ve que lee demasiadas novelas policiacas". (Es que Pepita, en efecto, era una lectora voraz de novelas de Agatha Cristie). Y siguió poniendo unos papeles en la cartera.

"Bien, volvió a decir el Gerente, déjeme ir con usted hasta la puerta y veremos quién es ese coco". Y fue con Pepita hasta la puerta y vió a aquel buen hombre... y lo encontró tan inofensivo y tan viejecito que... vamos... le dejó entrar sin temor alguno. Le hizo pasar (Pepita estaba asustada). Le hizo entrar en la sala de espera y le invitó a sentarse, mientras se sentaba frente a él.

Iban a iniciar la conversación. El Gerente se levantó un momento, se acercó a Recepción -donde permanecía Pepita- y la dijo: "Yo voy a conversar un momento con él, convendría que bajase usted y, luego, subiese con el Conserje. Probablemente sea... qué sé yo... algún anciano desmemoriado que ha supuesto que en una Agencia de Publicidad puede poner un Anuncio para recuperar a un gato que se le ha perdido...". Y se puso a reir bajito al ver la cara de asombro que esta vez ponía Pepita.

"Dígame, señor, en qué puedo servirle", era la frase de rigor. Y la dijo con el tono respetuoso y hasta compasivo con el que uno se dirige, digamos, a un abuelito. El abuelito empezó a hablar mientras metía la mano en aquellos que parecían enormes bolsillos de su largo gabán. Sacaba "cosas" y las ponía encima de la mesita baja de aquella sala de espera. ¿Qué es lo que estaba sacando?

Definitivamente, pensó el Gerente, aquel hombre no estaba bien... sí, no estaba bien de la cabeza. Estaban en toda una Agencia de Publicidad y no en una ... ¿Quién sabe lo que puede imaginarse un anciano así del sitio donde está?... sí, en una Oficina de Empeño, para empeñar cosas...

(El maestro observa que los niños se van cansando de tanto cuento... y decide abreviar)

No puede contenerse al ver que el Personaje (y ¡qué personaje más curioso!) ha hecho ya tres incursiones al largo bolsillo (se le ve cómo tiene que hacer esfuerzos para llegar al fondo de ese, sin duda, "bolsón"), y le pregunta: "Y usted, ¿Qué hace?". INCREIBLE. Verdaderamente increíble fue la respuesta: "No, no hago nada extraño: simplemente le estoy dejando unas muestras de uno de mis productos (y la palabra PRODUCTOS la pronunciaba así: como si fuera con mayúsculas). Esto que estoy poniendo son PETALOS DE ROSA frescos y de la mejor calidad."

El Gerente le miró... le miró como se mira a un loco, con cara de asombro y teñida de una contenida indignación. Y ya no pudo más: "Usted está rematadamente LOCO (y dijo "loooco"). ¿No se da cuenta de que esto NO ES LO QUE USTED SE FIGURA, sino una Agencia de Publicidad?"

Entonces habló el anciano. Y fue como para escucharle. Sabía lo que decía y sabía decirlo. Explicó que en la SOCIEDAD CONSUMISTA en que vivimos, todo se puede vender si se encuentran argumentos adecuados para venderlo. Eran cosas "del pasado", pensó el Gerente, mas... le gustó escucharle.

Habló de LA ESCALERA DE AIDA: de ese Despertar el Interés después de haber Despertado la Atención, para hacer saltar El Deseo en el futuro Consumidor y así inducirle a la Acción. Sin duda, aquello fue un panegírico de la Publicidad -aunque a la antigua, siguió pensando el Gerente-.

Una vez terminado aquel brillante aserto, el Anciano: ya muy solemne y sin aquel rostro de indecisión o timidez que había presentado hasta entonces, remató lo dicho de esta manera: "Yo tengo -por decirlo de alguna manera- cantidades "industriales" de estos tres PRODUCTOS: PETALOS DE ROSA (y señaló los que había sobre la mesa), PLUMAS DE GORRION y HUESOS DE ACEITUNA.

Señor Publicitario -porque usted lo es y probablemente es hasta alguien importante en esta Agencia- YO QUIERO VENDER ESOS PRODUCTOS. Y quiero venderlos gracias a la publicidad que de ellos me hagan ustedes.

Y así terminó este CUENTO ANIMADO que el maestro "soltó" en aquella Escuela de pueblo: una escuela en que -como se estila ahora- había muchachos y muchachas.

Fue luego cuando les explicó con detalle lo que era una Agencia de Publicidad, lo que representaba en nuestra Sociedad Consumista, los efectos que la publicidad hacía en las mentes de todos nosotros y... todo lo que - relativo a los mecanismos del mercado y la economía de los países - podía hacerse comprender a unos niños.

El maestro terminó con aquella frase: LA PUBLICIDAD NO DEBE SER MENTIRA, SINO LA INTELIGENTE EXAGERACION DE LA VERDAD.

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Os lo aseguro, esto -más o menos- es lo que nosotros también "soltamos" en prácticamente todos los TACURSES. Porque, así historiado, va a entrar mejor aquello que ES UN EJERCICIO DE FLUIDEZ Y FLUENCIA CREATIVOS.

Ahí va: DETERMINAR AL MENOS DIEZ UTILIZACIONES "NUEVAS" PARA LOS PETALOS DE ROSA, LAS PLUMAS DE GORRION Y LOS HUESOS DE ACEITUNA.

Una vez enlistadas las 10 UTILIZACIONES de cada Producto, debereis ELEGIR UNA DE ELLAS y, una vez elegida, IMAGINAR UN SLOGAN Y UN DIBUJO para hacerlo figurar en los Anuncios.

Parece ser que, en aquella Escuela, los niños disfrutaron "como enanos". (Qué dicho tan tonto y tan sin sentido, pero me parece que es así "como se dice", ¿O no?).

Ya podeis figuraros que, para SACAR TODA LA DIVERSION POSIBLE AL JUEGO y también para comprobar una vez más LA VIRTUALIDAD DEL GRUPO, esta Ejercitación conviene hacerla con Grupos de 4 ó 5 personas, a ser posible. Nuestra costumbre es formar estos Grupos: es decir, designar quiénes han de ser los integrantes de cada uno (simplemente señalándolos: tú, tú y tú, procurando -como siempre- atinar en "la mezcla").

Y se les da estas escuetas instrucciones: Designad un Secretario del Grupo, para que tome notas y sea luego El Portavoz de vuestras conclusiones. Luego, bautizad el Grupo, con un nombre de combate, digamos. Y en cuanto se termine el trabajo de todos y haya que leer los resultados, hacedlo exponiendo qué Grupo es el que habla, los nombres de los componentes y el del Portavoz. ¡ QUE APROVECHE EL EJERCICIO !!

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